El tamizado es un proceso físico, con el objeto de separar la materia en sus distintos tamaños. Se realiza con una herramienta denominada tamiz, puede ser simplemente una red, o un proceso industrial.
El tamizado puede realizarse en seco (el material está en polvo) o en húmedo, el tamizado en húmedo se efectúa con adición de agua, o un fluido al material (como el esmalte).
En cerámica su uso está más que justificado ya que nos es de utilidad para un análisis de los componentes, para una mayor uniformidad en los esmaltes, así como para que no se atoren las herramientas. Se clasifican según los orificios que tiene por unidad de medida, se denominan escala mesh.
Véase[]