La técnica de introducir agua en el horno de leña, es usada por los ceramistas en diversas épocas. Está documentado su uso en los yacimientos de hornos de Corea "Korean celadon kiln", en los hornos de ladrillos chinos, unos 300 años atrás y existen evidencias en Japón. Con el desarrollo de hornos más eficientes y con otros combustibles desapareció en el trabajo cotidiano, siendo reinventada la técnica en la actualidad por los ceramistas.
Se basa en la capacidad del agua supercrítica de secuestrar los álcaliz y de reaccionar sobre los silicatos, con esto se consigue la desvitrificación de las superficies de los esmaltes, consiguiendo un alto brillo en los mismos y una alta vitrificación de la matriz cerámica.[1] Además otro factor que influye principalmente en la pasta, se puede dar el caso de una reducción que produce el hidrógeno, y la de una reoxidación si la introducción se realiza sobretodo en el enfriamiento del horno, entre los 900 - 1000 ºC.[2]
La mezcla del agua con el C de los gases presentan dos reacciones simultáneas:
- Gas de agua, reacción endotérmica. Se necesita 600 °C para poder llevar acabo la reacción.
- H2O + C → H2 + CO (ΔH = +131 kJ/mol)
- Y la segunda que nos da un componente oxidante, CO2:
- CO + H2O = CO2+ H2
Ceramistas actuales simulan el efecto del aporte de agua en los hornos de gas, aportando cada cierto tiempo agua pulverizada.
Enlaces externos[]
- Water in Woodfired Kilns. by Owen Rye.
Referencias[]
- ↑ Introducir agua en el horno
- ↑ Introducing water in woodfiring. Squirting Water into Kilns.